Las horas de sueño y descanso nos afectan a nuestra salud, así como la forma en la que lo hacemos. Por ello desde Equipo de la Torre – Unidad Integral de Neurocirugía os queremos dar algunos consejos beneficiosos para vuestra salud a la hora de dormir con una hernia.

Cuidar la espalda mientras descansamos: la mejor postura para dormir con una hernia

La Organización Mundial de la Salud advierte que dormir es una necesidad para nuestro organismo. Por ello debemos respetar tanto las horas de sueño como la higiene postural mientras dormimos, ya que esto repercute en nuestro bienestar.

La OMS establece que para un adulto hay que dormir unas 7 horas al día y en el caso de los niños, entre 10 y 12 horas diarias ininterrumpidas. De otro modo, dormir poco y mal nos puede llegar a causar graves trastornos cognitivos, entre otras consecuencias.

La higiene postural en este caso es muy importante a la hora de prevenir posibles molestias musculares.

Nuestra columna mientras dormimos

La postura perfecta no existe. Nuestra columna vertebral posee cierta curvatura con el fin de repartir la carga y presión del cuerpo humano, por lo que la mejor posición será aquella que mantenga esta curvatura lo más natural posible, es decir, en su posición fisiológica natural.

La correcta elección del tipo de almohada y colchón también afectarán a nuestra salud mientras dormimos.

Dormir de lado:

Es la postura más recomendada y saludable para nuestro cuerpo. Cuando dormimos de lado, evitamos generar posible dolor cervicales y de espalda. Además, también nos afecta positivamente en la respiración así como nos ayuda a reducir el reflujo gastroesofágico.

Si queremos dormir de esta forma, se recomienda una almohada gruesa, para así la cabeza repose alineada con el eje que marcan las vértebras.

En cuanto al colchón, que sea firme para evitar que se hunda la zona pélvica, y así permitir que las vértebras permanezcan alineadas. 

Pero esta postura también tiene una parte negativa, y es que al reposar el peso del cuerpo sobre un lado, presiona y provoca estrés en los nervios y músculos.     

Dormir boca arriba

Al dormir boca arriba, estamos previniendo dolores de cuello y de espalda, ya que en esta postura la columna vertebral reposa recta y sin forzar.

El papel de la almohada en esta postura es el siguiente: debe tener un grosor suficiente como para que no se vaya hacia atrás la cabeza, pero manteniendo la curvatura natural de nuestra columna.

Para reducir la compresión de los nervios en nuestras extremidades, la mejor colocación es que nuestros brazos estén rectos o sobre el cuerpo.

Es una postura muy recomendada para personas con problemas de sueño por ansiedad, ya que facilita la entrada y salida de aire y así evitar sensación de ahogo.  

La mejor postura para dormir embarazada

Los médicos recomiendan que si una mujer está embarazada, lo mejor es que duerma sobre el lado izquierdo, ya que así se evita la compresión de la vena cava, favoreciendo la circulación de la placenta.

En este otro artículo de Equipo de la Torre podréis encontrar más información sobre la higiene postural en el embarazo.

Por último, señalar que la postura menos recomendada es boca abajo, ya que produce mucha tensión en la zona del cuello y columna. 

Cómo dormir con una hernia

Padecer una hernia discal nos afecta a las distintas etapas de nuestro sueño. El dolor puede impedirnos un correcto descanso, hecho que no es nada beneficioso para nuestro organismo.

La postura, el tipo de almohada y el colchón pueden hacer mucho más por nuestro descanso de lo que pensamos. Si tenemos unos elementos inadecuados, el dolor puede empeorar o ralentizar nuestra recuperación. En cuanto a esto, la mejor elección sería un colchón de dureza media. Si el dolor es muy intenso y duradero, la solución sería una cama articulada.

Con respecto a la almohada lo mejor es una cervical, ya que ayuda a mantener la espalda y el cuello alineados.

Al igual que en el resto de casos anteriores, dormir boca abajo es la peor postura cuando padecemos de hernia discal, ya que en esta posición se ve reducida la curvatura natural de nuestra espalda. Como consecuencia, aumenta la presión en esta zona.

Con nuestro cuello pasa igual: al forzar la postura hacia un lado, aparece dolor.

 

 
Dormir de lado es una de las mejores soluciones para el descanso de personas que padecen de hernia discal: mediante una postura fetal y abrazando una almohada corporal, podremos aliviar el dolor de espalda.

Si preferimos dormir boca arriba, es mejor hacerlo con una almohada más bien dura entre las rodillas. De esta forma reducimos la tensión en la parte inferior de la columna vertebral, y facilitamos nuestra recuperación.